Seguridad vial: Conducir con lluvia

Han llegado las lluvias y, como otros años, conviene repasar las nociones básicas de seguridad al volante sobre asfalto mojado.

La mayor parte de los accidentes que ocurren durante la estación de invierno se producen debido a la lluvia. Las frenadas se alargan, disminuye la visibilidad y se resiente la estabilidad del coche en las curvas. En las últimas décadas, sistemas de ayuda a la conducción, como ABS y ESP, han reducido drásticamente los accidentes, pero nunca está demás conducir con precaución cuando empiezan a caer las primeras gotas.

Consejos básicos de conducción bajo la lluvia

Carretera mojada, circulación con lluvia en la ciudad.

Antes de arrancar el vehículo se deben revisar los elementos que nos permiten ver y ser vistos. Es decir: Hay que llevar limpio el parabrisas, tener los limpiaparabrisas en condiciones óptimas para su correcto funcionamiento y saber si las luces de nuestro coche o moto funcionan adecuadamente para facilitar que otros vehículos vean nuestra posición.

Durante la conducción debemos adecuar nuestra velocidad a las condiciones de visibilidad y aumentar la distancia de seguridad con otros vehículos para poder frenar a tiempo si fuese necesario. Tendremos que adaptarnos a la pérdida de adherencia sobre el asfalto aumentando la distancia de seguridad y reduciendo la velocidad, especialmente en curvas.

Debemos ser conscientes en todo momento del entorno que nos rodea para minimizar las probabilidades de accidente. Si siempre se debe conducir con precaución, más aún en caso de lluvia.

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